El Instituto aplicará multas de $ 20.000 a una primera tanda de más de 100 productores porque no declararon el origen de la semilla de soja que sembraron en la última campaña, 2015/2016.
El Instituto Nacional de Semillas (Inase) aplicará multas de $ 20.000 a una primera tanda de más de 100 productores porque no declararon el origen de la semilla de soja que sembraron en la última campaña, 2015/2016. Así lo expresó el presidente del instituto oficial, Raimundo Lavignolle, tras dar una charla en el marco de la Exposición Rural de Palermo.
Según Lavignolle, de entre 14.000 y 16.000 productores que deberían haber informado el origen de la semilla que usaron, lo hicieron algo más de 9000 productores por una superficie equivalente de 9 a 10 millones de hectáreas. Es decir, casi la mitad del área con soja del país según informó el diario La Nación.
Sin embargo, calculó el funcionario, «debería haber sido más [la superficie declarada], con 14 a 15 millones de hectáreas». En este sentido, lo declarado se tendría que haber arrimado al 70 o 75% del área.
El Inase ya mandó intimaciones a más de 2600 productores y próximamente comenzará a aplicar multas de unos $ 20.000, en promedio, a los primeros 100 productores. Después extenderá las sanciones. Además, se publicarán los nombres de los infractores. Como el Inase también detectó irregularidades en la cadena comercial, con ventas de empresas que no estaban inscriptas, también aplicará sanciones a las firmas que vendieron semillas.
«En cualquier momento empiezan a salir las multas», indicó el jefe del organismo ante una consulta de La Nación. El productor sancionado no podrá hacer uso propio este año, con lo cual deberá adquirir la semilla fiscalizada.
Por el bajo nivel de legalidad del mercado de semillas en soja y trigo, viene cayendo la cantidad de variedades nuevas inscriptas. De 200 variedades que había en 2013, se cayó a 100 el año pasado, en tanto que en lo que va de 2016 suman 50 variedades, si bien hay tiempo para que se anoten nuevas. Particularmente, en soja el año pasado se inscribieron 60 tipos, y en lo que va de 2016 las variedades nuevas son algo más de una veintena.
Hace unas semanas, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), Dardo Chiesa, le mandó una nota vía correo electrónico al presidente del Inase solicitando la aclaración de diversos temas, entre ellos, porque teme un posible faltante de semilla de soja para la nueva campaña. Según Chiesa, el Inase le respondió pidiéndole su firma original certificada y una copia del acta donde lo designaron presidente de CRA. «Jamás me pidieron algo así», indicó el ruralista.
Chiesa estaba en la charla que daba Lavignolle y le recordó al funcionario esa requisitoria del organismo. Lavignolle le respondió que la intención fue «para darle valor» a su denuncia con un expediente.
Ante una consulta sobre la conformación del directorio del Inase, Lavignolle indicó que «está muy avanzada» la integración de ese cuerpo.