La abogada del Obispado Gabriela Contepomi, imputada por encubrimiento en la causa de Néstor Monzón, escribió una carta luego de denunciar al Fiscal Regional Eladio García. Asegura que en este tiempo vio un «sálvese quien pueda» y agrega que «he visto Pilatos y Judas varios».
A todos
En virtud de los hechos de dominio público Yo digo:
Nunca fue ni será mi intensión ocultar verdades y menos aun delitos, lamento si asi se interpreto no conozco la comisión de ningún delito a la fecha.
No he cometido ningún delito solo hice mi tarea o profesión y si asi lo creen me presumo inocente hasta que se demuestre lo contrario. No se hace justicia por otros medios que no sea la justicia, no existe juicio por procesos paralelos o por desacreditación eso es arbitrario, injusto e inmoral.
Si quise evitar que conversaciones internas de la iglesia como cuestiones económicas, discusiones de los pastores, confesiones telefónicas y otras fueran ventiladas que yo sepa eso no tiene porque ser ventilado.
Siempre cumplí un rol profesional antes y ahora. Aunque no me gustará el tema no puedo dejar de lado valores constitucionales que perjudiquen a otros por interés mío,PARTE DEL JURAMENTO QUE SE HACE AL RECIBIR EL TITULO.
No tengo idea de porque se me ha atacado, desvalorizado y descuartizado. Se olvidaron de todo es pos de no se que.
Algunos me han abandonado como si tuviera la peor peste del mundo,puedo cometer errores pero no delitos.
He puesto cuerpo y alma en muchas cosas, he puesto cara y mejillas varias veces no he visto lo mismo si vi un «sálvese quien pueda» o «un yo no la conozco » pero eso no soy yo la que juzgará ello. He visto Pilatos y judas varios.
No tengo idea de porque no se publica todo sino que se saca lo que solo conviene para herir, no todos hay honrosas excepciones.
No tengo idea de porque de quienes mas espere hubo silencios.
Durante 28 años dedique por opción personal a ayudar al otro muchas veces soportando presiones, apretadas y criticas y si con eso pude hacer feliz a alguna persona lo volvería a soportar.
Puedo y cometí errores como todos pero no tuve intención de hacerlo y menos herir a terceros.
Los que me conocen de verdad saben como soy, quien soy, como vivo, etc.
Me han quitado todo, me han roto el alma, me van «matando de estocadas», si creen que el cuerpo aguanta todo les digo que no es asi pero si eso hace feliz a alguien que asi sea.
La prensa hace su labor y los demás también.
No deseo que nadie viva lo que vivo es un infierno.
El dolor no se va, aprendí de la traición de los leales y de la dura crueldad de quienes se creen perfectos, al decir de San Juan XXIII.
Pero también tengo a mi lado gente valiosa, inesperados apoyos, inesperados amigos.
Solo expreso el dolor que tengo, la desilusión y la angustia.
Todos expresaron los suyos yo lo hago ahora.
Los beso en San José
Dra Gabriela Contepomi