Amaro Nadalich confirmó que este año no habrá ninguna figura importante por los costos que representa y la enorme deuda que les quedó el año pasado.
Pésima publicidad, mala gestión en la venta de entradas, falta de cobertura mediática en vivo del evento, y la apuesta a un solo artista para que cubra todos los costos llevaron al Festival del NEA al borde del abismo.
Amaro Nadalich prometió dar un paso al costado para la renovación de la comisión pero después se arrepintió y sigue dirigiendo los destinos del evento con las mismas estrategias que lo llevaron a tener que pedir dinero prestado a una empresa, y no a un banco como dijo en su momento, para poder cubrir los costos del último año.
Esta situación generó que varias personas se convocaran para colaborar con el festival pero luego, por distintos desencuentros con los históricos miembros de la comisión, se disolvieron y Nadalich volvió a quedar nuevamente solo y, como siempre, mal asesorado.
Todo el mundo que pasó por la comisión reconoce que Nadalich es un trabajador incansable y que ama al evento como nadie, pero critican su falta de delegación de actividades en personas con ideas nuevas que busquen cambiar el rumbo actual.
Ahora Nadalich y los miembros de la comisión organizan un bingo para juntar fondos y devolver el dinero a la empresa que realizó el préstamo.
En diálogo con la prensa el presidente de la comisión organizadora confirmó que este año «no habrá» un artista de renombre porque el riesgo es demasiado alto y además queda mucho dinero por saldar.
Finalmente vale mencionar que el gobierno local ni provincial están interesados en hacerse cargo de la organización del evento y sostienen que «es un evento privado que organiza una comisión independiente al estado».
