El hombre que realizó las gestiones para la compra del camión unimog, utilizando el nombre de la comunidad aborigen de Los Laureles, habló de una complicidad entre el presidente comunal Juan Antonio Chapero y el abogado Andrés Ramseyer.
Pablo Zancada habló en «La Grieta (FM 94.5 Central)» sobre el escándalo por la compra de un Camión Unimog usado que fuera primicia en Semanario Reconquista este fin de semana.
El titular de Agricultura Familiar y ex titular de la Estancia Las Gamas es el principal sospechoso de una maniobra, cuento menos irregular, para la compra del vehículo por un monto cercano al medio millón de pesos.
Zancada llegó a los estudios de la radio con una explicación que dejó más dudas que certezas. Explicó que la maniobra se realizó «porque era la única forma que teníamos de resolver esa situación inmediatamente» y contó que haciéndolo por los carriles normales se hubieren demorado por lo menos seis meses mientras que con este ardid solo tomó 20 días.
Zancada dijo que «toda la comunidad (aborigen) sabía y estaba de acuerdo» y que además de conseguirles el dinero para el camión también les consiguió $50.000 para que puedan pagar la energía eléctrica, cosa que no ocurrió y ese dinero desapareció. «Yo me enteré mucho después que no pagaron la luz, yo que se que hicieron con esa plata», dijo el funcionario provincial.
«El camión nos lo consiguió Guillermo Yapur y (su tío) «bachicha» Yapur. Pueden preguntarle a ellos cualquier cosa», añadió.
Además sostiene que hay una conspiración entre el presidente comunal de Los Laureles, Juan Antonio Chapero, y el abogado Andrés Ramseyer.
«Juan Antonio Chapero está enojado porque nosotros le bajamos la guita a los de la comunidad aborigen y no a él, ese es el problema. ¿Quién creés que consiguió el abogado?», dijo y agregó que el presidente comunal «dividió a la comunidad aborigen y ahora los jóvenes no respetan y hasta atacan con cascotes a los ancianos. Eso no había pasado jamás».
Por otra parte Zancada asegura que el abogado Andrés Ramseyer tiene un problema personal con él y con la iglesia, que ya data de algunos años, y que es por eso que lo persigue en cuanta causa puede a él y a la Iglesia Católica (incluido el caso Néstor Monzón). Y fue más allá «tiene una denuncia por una amenaza a mi hijo».
Para Zancada aquí no hubo delito y se muestra «muy tranquilo» y espera que la justicia lo cite para poder aclarar la situación que considera «es lo mejor que se podía hacer en ese momento».