El insólito fallo judicial había dejado con «prisión domiciliaria» a un joven que violó a un menor en Arroyo Ceibal. Adujeron que estaban seguros que cumpliría con las restricciones impuestas. Fueron los vecinos los que denunciaron que salía sin problemas y hasta él mismo lo reconoció. Ahora pasará los próximos años tras las rejas.
Esteban Gabriel Romero, de 18 años, fue condenado por violar a un nene de 9 años en Arroyo Caibal. El condenado recibió una condena, impuesta por la Jueza Claudia Bressán aceptando un acuerdo judicial entre el Fiscal Norberto Ríos y el Defensor Andrés Ramseyer, para que pase 8 años de prisión domiciliaria en casa de su madre, en Alvear 278.
En la misma semana en que el joven fue condenado se conocieron, por parte de los vecinos y no de la justicia, informaciones sobre la violación de la prisión domiciliaria y la presión sobre los miembros del poder judicial fue tal que debieron convocar a una audiencia de urgencia para tratar el tema.
Sentado en el banquillo de los acusados, el propio Romero confesó que no cumplió con lo pactado y que fue al kiosco a comprar golosinas para su sobrino. Se mostraron fotos y videos en la audiencia y tras eso la misma jueza que había sido insólitamente benevolente en el pasado revocó la prisión domiciliaria.
Inmediatamente el condenado fue trasladado a la Unidad Regional IX y luego será encarcelado en una cárcel provincial, dependiente del Servicio Penitenciario. Estiman que irá a la Cárcel de Las Flores.