Finalizó el juicio y la militante de la Tupac Amaru quedará en libertad. Los jueces accedieron al pedido realizado por la fiscalía respecto del delito de «daño». La defensa esperaba un sobreseimiento. Fue absuelta por las amenazas.
«No se dejen apretar por el poder político; dicten lo justo», había clamado la dirigente social en su último descargo antes de conocer el veredicto. Fue condenada en el juicio por el escrache al ahora gobernador Gerardo Morales cuando era senador nacional en 2009.
El Tribunal Oral Federal de Jujuy dio a conocer este miércoles a la tarde el veredicto del juicio contra la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, y otros dos integrantes de la Red de Organizaciones Sociales, imputados por el escrache al gobernador Gerardo Morales cuando era senador nacional, en el 2009.
Durante los alegatos, la Fiscalía pidió tres años de prisión condicional para Sala, mientras que la querella reclamó ocho años, el máximo previsto en el Código Penal para este tipo de delito.
Por su parte, la defensa pidió la absolución de la dirigente, tras plantear la prescripción de las acciones que se le imputan, además de sostener que Milagro Sala no estuvo presente en el hecho.
Lo mismo solicitó en relación a los otros dos imputados, Graciela López y Ramón Salvatierra, que en el juicio negaron haber sido «enviados» por la líder de la Tupac Amaru.
«Nosotros entendemos que no se trató de un delito común, porque para esta gente el ejercicio de la violencia como método de hacer política era normal», sostuvo por su parte el abogado de la querella Eduardo Vergara.
Durante el juicio, dos de los testigos -René Orlando Arellano y su mujer Cristina Chauque, ambos ex cooperativistas- relataron que existió una reunión en casa de Milagro Sala para planificar la protesta contra el entonces senador Morales, pero la dirigente social y López, a quien señalaron como participantes de ese encuentro, lo negaron.
Según Vergara, quien expresó «las mejores» expectativas de la querella en relación al veredicto que se dará a conocer mañana, quedó expuesto en el escrache «el ataque a las instituciones del gobierno nacional, lo que es gravísimo».
Con motivo de la última audiencia en este proceso será desplegado mañana un importante operativo policial en las inmediaciones del juzgado, ubicado en la calle San Martín del centro de la capital jujeña.
De hecho, fuentes policiales consignaron que reforzarán la seguridad luego de los incidentes registrados la semana pasada en el marco de la audiencia del miércoles último con dirigentes del Frente para la Victoria que viajaron desde Buenos Aires, y donde la diputada nacional Maira Mendoza fue agredida por un efectivo policial.
Los hechos que se ventilan en este juicio ocurrieron el 16 de octubre de 2009, en la sede del Consejo Profesional de Ciencias Económicas de Jujuy, cuando Morales junto al entonces presidente de la Auditoría General de la Nación, Leandro Despouy, se disponían a iniciar una conferencia referida al control de fondos públicos que se destina a las organizaciones sociales, y fueron agredidos con huevazos, lo que fue denunciado por el ex senador y actual gobernador.
Milagro Sala, quien se encuentra detenida en el penal de Mujeres de Alto Comedero, está acusada al igual López y Salvatierra por «presuntas amenazas coactivas y daño agravado», con diferencias en cuanto al grado de participación que le cupo a cada uno de ellos en los hechos imputados.
Paralelamente, Sala está siendo sometida a otro proceso en el juzgado Contravencional de Jujuy por el acampe que encabezó durante 51 días en la plaza Belagrano, entre diciembre y enero de 2016.
En ese caso, se le imputa una infracción al artículo 113 y artículo 7 del Código Contravencional, que alude a la ocupación del espacio público y obstaculización del tránsito vehicular y peatonal.
Finalmente Milagro Sala fue condenada a 3 años de prisión en suspenso por el delito de «daño» en el escrache a Gerardo Morales y absuelta por el delito de «amenazas». Con este fallo la militante deberá ser inmediatamente liberada.