La semana pasada, desde el máximo órgano judicial de la nación, una noticia que golpeó muy fuerte la historia y el futuro democrático argentino. La Corte Suprema declaró aplicable el beneficio del 2×1 para las penas de prisión por delitos de lesa humanidad. Fue por decisión de mayoría, con la firma de Elena Highton de Nolasco, Carlos Rosenkrantz y Horacio Rosatti en el caso de Luis Muiña (Expte “BIGNONE, Benito A. y otro s/recurso extraordinario”) por tratarse de la ley “más benigna”.
Rodrigo Corti
Semanario Reconquista
Raúl Medina, a quien la última dictadura cívico-militar le arrebató la vida de sus padres para siempre, habló en La Grieta (FM Central 94.5) sobre las sensaciones que le generó el escandaloso fallo de la Corte.
“Este tipo de noticias generan un poco de bajón, porque van contra conquistas de muchos años de lucha, de concientización y de trabajar lo que es Verdad, Memoria y Justicia. Y la sociedad la acompaña, porque todos los años se hacen distintos tipos de encuestas y marchas que marcan que cada vez es más la gente que levanta la bandera del Nunca Más. Que la Justicia haya tenido esta actitud me parece lamentable. Esta misma Corte, salvo los dos nuevos miembros, se venía manifestando en contra de esto”, afirmó a quien propios y extraños lo llaman Lali. Y agregó: “la población, en su mayoría, está en contra. El pueblo no comparte este tipo de medidas porque cree que los delitos han sido sumamente contundentes y claros. En Reconquista, por ejemplo, se trabajó mucho y no fue nada fácil avanzar. Recuerdo que años antes del juicio (Causa 050) mucha gente repetía: es un verso, eso no pasó, están inventando. Y en los juicios se demostró, con todas las garantías y todas las de la ley, que todo lo que decíamos y denunciamos era cierto. Hubo apropiación de un menor en un sanatorio de Reconquista, hubo abusos y violaciones, hubo torturas y también desaparecidos”.
La ley 24.390 –conocida popularmente como el beneficio del 2×1-, hoy derogada, estuvo vigente entre los años 1994 y 2001. Permitía computar doble, a partir del segundo año de detención, los días que pasaron sin sentencia firme. De esta manera las penas pueden reducirse de una manera contundente.
“Este país era un ejemplo en el mundo en cuanto a lo que se venía haciendo en materia de derechos humanos; y digo venía porque últimamente hemos visto unos cuantos retrocesos. Con este 2×1 se intenta sentar jurisprudencia como para que nos olvidemos de lo sucedido, como si no fuera algo tan importante para tenerlo en cuenta. Este fallo de la Corte no da de baja las condenas porque ya están demostradas y ya han sido dictadas las sentencias, pero sí avala que este tipo de delincuentes puedan estar saliendo antes sin cumplir la totalidad de su condena”, puntualizó quien integra desde hace años la Asociación Norte Amplio por los Derechos Humanos.
“Es importante que desde la Provincia hayan salido a repudiar esto. Lo triste es que la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación esté de acuerdo, cuando se supone que desde esa área deberían estar totalmente en contra. Sin embargo, avalan una medida tan triste como esta. Lo que no hace más que confirmar lo patético que es su titular (por Claudio Avruj). Lamentablemente la Justicia debería ser bastante más independiente, ya que se precia de tal. Pero evidentemente está siguiendo un lineamiento más político que otra cosa. No es casualidad, me parece, que 2 de los 3 votos afirmativos provengan de los jueces que propuso Mauricio Macri”, reflexionó Medina sobre el posicionamiento del poder político.
Consultado por el rumbo coincidente que tienen el pedido de “reconciliación” de la Iglesia, las expresiones negacionistas de distintos miembros de Cambiemos durante el último 24 de marzo y este, para muchos, indulto encubierto a genocidas de la Corte; el Coordinador del Nodo de Salud expresó: “claramente hay una línea intentando instalar la teoría de los dos demonios, de hacer confusa la temática par que la gente piense que todo es lo mismo. Y de hacer creer que todo esto surge de la nada, de un día para el otro. Y también de ocultar el trasfondo político-económico, es decir, de donde viene todo. Porque no surgió de un repollo ni se dio porque sí, sino que había un interés para poder implementar el modelo económico que implementaron. Y eso sólo se podía hacer con represión y generando, mediante el miedo, el famoso No Te Metas”.
“No creo que esto tenga un costo político para Cambiemos en las próximas elecciones. Quizás sí para la UCR pero no para el Pro, ya que representa a sectores de derecha o centro-derecha que piensan igual en este sentido. Pero a cierto espectro del radicalismo, el menos conservador, sí creo que esto le va a significar un costo político. Más a largo que a corto plazo quizás”, manifestó Medina a la hora de analizar el escenario electoral en el que se dan estas medidas.