La muerte de Kevin Aguirre generó movimientos y proyectos en el Concejo Municipal de Reconquista.
Francisco Sellarés habló sobre el tema y dijo que cuando se pusieron a buscar antecedentes del caso encontraron ordenanzas del año 88, 89, 93, 96, “donde un sinnúmero de proyectos quedaron solo en deseos”.
“Hoy son varias las dificultades que se evidencian en distintas zonas de la ciudad por el estacionamiento y también por la circulación, pero por sobre todo el peligro que conlleva al tránsito en general. Debemos buscarle una solución de fondo a esta problemática”, remarcó el concejal.
El bloque también presentó una batería de modificaciones a las ordenanzas vigentes para evitar que los camiones circulen por el centro de la ciudad y en el caso de hacerlo, violando la normativa, tengan sanciones más severas.
Algunas de esas modificaciones tienen como objetivo retener la licencia de conducir al infractor y se amplía la zona vedada para la circulación de camiones.
“Tenemos que seguir caminando para encontrar una solución de fondo a esta problemática y estamos convencidos con que la solución de fondo es que la ciudad de Reconquista cuente con una con la playa para estacionamiento para camiones con una estación de transferencia de cargas”, siguió y reconoció que se trata de “un reclamo histórico de la ciudadanía”.
Sellarés dijo que hay lugares para poder hacer esta infraestructura. “Incluso en el año 90 se había comprado un predio para la futura playa de camiones” pero luego esos terrenos se donaron a instituciones de la ciudad. Era un predio en la Ruta Nacional N° 11 en inmediaciones del Oratorio.
“Una de esas instituciones no hizo uso de ese terreno y se retrotrajo todo volviendo al municipio, la otra sí hizo uso e incluso escrituró y tiene uso pleno del predio que es la Asociación de Bomberos Voluntarios de Reconquista. No obstante ese espacio de tierra que tiene el municipio puede ser utilizado para este emprendimiento, por eso nosotros queremos declararlo de interés social porque se abre un abanico de posibilidades como por ejemplo licitarlo y que sea un emprendimiento privado o un emprendimiento mixto, pero que en el transcurso del tiempo se pueda solucionar de fondo esta cuestión”, siguió Sellarés.
Finalmente dijo que “no es una obra de infraestructura de gran envergadura o de enormes costos para quien decida afrontar este trabajo”.