Juan Valdez, el único detenido por la desaparición de Rosalía Jara, decidió extraerse sangre para que la Justicia determine si su ADN coincide o no con el de la hija de quien fuera su amante durante varios años. Esta información nos fue confirmada por su abogado Jorge Faisal, quien agregó que la misma se llevará a cabo el próximo miércoles en una clínica de la ciudad de Vera.
Quien se encuentra imputado desde el pasado 21 de julio por el delito de “retención y ocultamiento de persona” pretende, con esta decisión, dejar en claro que no es el padre de la nena de Rosalía. Y, por consiguiente, tumbar uno de los elementos fuertes (no el único) que tiene el Fiscal Gauna Chapero dentro de su compleja investigación.
En relación a la declaración de Valdez, sin dudas lo más esperado desde el mismo momento en el que fuera detenido, su abogado nos anticipó que tienen pensado hacerlo recién al momento del juicio.
La noche del 1 de julio Rosalía fue a un bar de Fortín Olmos donde estuvo junto a unas personas aproximadamente hasta las 22.30 Hs. Se levantó y se fue sin decir nada y caminó 200 metros hasta una garita que está abandonada. Ese es el rastro que marcan los perros especializados de los Bomberos Zapadores de Santa Fe, el cual sería coincidente con lo relatado por algunos testigos.
Allí subió a un vehículo y se pierde su rastro. Los mismos perros indican que Rosalía estuvo en el auto del docente. Según el propio Valdez no sería raro que se encuentren rastros de la joven en el auto porque ellos son amantes desde hace mucho tiempo.
Pero la pericia en el celular de Valdez fue la clave ya que se pudo determinar que estuvo esa noche en la zona de la garita donde desaparece el rastro de Rosalía pero además se activó en la zona del Arroyo Golondrina cerca de las 2.30 Hs siendo que él, dijo que esa noche estaba durmiendo desde la medianoche.