Se trata de doce establecimientos de gran importancia social y educativa en zonas rurales. El diputado socialista presentó un proyecto para que reciban aportes del Ministerio de Educación y puedan cubrir gastos de funcionamiento.
El jefe del bloque de diputados socialistas de Santa Fe, Rubén Galassi, presentó un proyecto de ley para que las Escuelas de la Familia Agrícola (EFAS) que funcionan en la provincia puedan recibir aportes del Ministerio de Educación para cubrir sus gastos de funcionamiento, como sucede con otros establecimientos privados. “Contribuir al financiamiento de estas escuelas es una forma de reconocer su rol social y educativo”, explicó el legislador del PS.
La primera EFA de gestión privada que se creó en territorio santafesino data de 1970; en la actualidad suman doce en su tipo, a las que asisten más de 1.300 alumnos e involucran alrededor de mil familias. Están ubicadas fundamentalmente en la Región 1 y 2 de la provincia, en las localidades o zonas aledañas a Moussy, Arroyo Ceibal, Villa Ocampo, La Sarita, Intiyaco, Colonia El Inca, Espín, Km 50, San Martín Norte, Colonia Durán, Totoras y Villa Saralegui.
“Tienen más de 30 años de historia y una profunda experiencia en la formación dentro de la pedagogía de la alternancia; se trata de centros educativos de gran importancia para las familias de la zona rural ya que les permiten a los chicos estudiar dentro de sus comunidades”, apuntó Galassi, quien propone modificar la ley Nº 6.427 (de Servicio Provincial de Educación Privada) para que las EFAS puedan obtener un aporte que ayude a solventar sus gastos de funcionamiento.
“La relevancia educativa y social de las EFAS, como parte integrante de un tejido de actores comunitarios que aportan valores y contribuyen al desarrollo de las familias, amerita que dispongan de una contribución por parte del Estado provincial, como sucede con otros establecimientos de educación privados, para solventar sus gastos”, fundamentó el diputado socialista.
La primera escuela de este tipo se abrió en la zona rural cercana a Moussy en 1970 por iniciativa de un grupo de vecinos, años después se sumó la de Arroyo Ceibal. El modelo se tomó de otras EFAS creadas en el norte del país a mediados del siglo pasado, con una propuesta pedagógica que excedía lo escolar puesto que incorporaba la participación de las familias, la comunidad y el sector productivo.
En 1971 las Escuelas de la Familia Agrícola accedieron al primer plan de estudios aprobado de manera experimental por las autoridades provinciales, pero durante la dictadura cívico militar dicho plan fue derogado y reemplazado por otro, incongruente con los objetivos y lineamientos de las EFAS. Con el retorno de la democracia, recuperaron sus valores y principios originales.
“El modelo implementado en las EFAS difiere de la educación agropecuaria o agrotécnica tradicional ya que adopta un conjunto de principios pedagógicos que atraviesan todo el proceso educativo y la trayectoria personal y familiar de los alumnos y alumnas, ubicándolos en un vínculo estrecho con la familia y la comunidad rural, y enfocándose de manera primordial para la vida laboral en este medio”, finalizó Galassi, quien rescató la impronta inclusiva y comprometida de estas instituciones.
El proyecto de ley fue presentado en la Cámara la semana pasada. Acompañaron a Galassi con su firma los diputados y diputadas Estela Yacuzzi, Omar Martìnez, Edgardo Martino, Oscar Pieroni, Eduardo Di Pollina, Inés Bertero, Joaquín Blanco y María Cecilia Ayala.