El Presidente firmó un decreto mediante el cual le quita poder de negociación a la CTERA al darle un solo voto en la mesa paritaria, donde antes tenía cinco.
El presidente Mauricio Macri firmó un decreto que pone en igualdad a todos los sindicatos nacionales docentes en el momento de negociar paritarias más allá de la cantidad de afiliados que disponga cada uno. Con la nueva norma, publicada este miércoles, la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) dejará de tener mayoría automática en la mesa de discusión con el Ministerio de Educación y contará, al igual que los otros cuatro gremios que participan del debate, con un solo representante.
Desde el Gobierno, consideraban «arbitraria» la mayoría de CTERA. «La reglamentación estipulaba un esquema proporcional, pero no decía, como debía ser, que cada X cantidad de afiliados correspondían tantos participantes», explicaron. El nuevo esquema será similar al que se emplea en el ámbito universitario. Allí se negocia con los gremios docentes y no docentes sin representaciones mayoritarias más allá de la cantidad de afiliados.
El decreto modifica el artículo 10 de la Ley 26.075 de Financiamiento Educativo que rige desde 2006: «El Consejo Federal de Cultura y Educación y las entidades gremiales docentes con representación nacional acordarán un convenio marco que incluirá pautas generales referidas a: a) condiciones laborales, b) calendario educativo, c) salario mínimo docente y d) carrera docente», dice el artículo.
El conflicto docente que signó 2017 comenzó a partir del rechazo de Esteban Bullrich, entonces ministro de educación, de atender una paritaria salarial a nivel nacional. Los gremios decían que «el convenio marco» que especifica el artículo 10 implicaba, en realidad, una paritaria que debía establecer el piso de ingresos para cada provincia. Ahora, el decreto remarca que el salario ya está acordado desde 2016. «El salario mínimo docente en todo el país no podrá ser inferior a un 20% por encima del mínimo vital y móvil», pactaron los gremios y el ejecutivo en ese momento.
A partir de ese piso, cada jurisdicción negocia con sus sindicatos locales. «El piso lo que busca es terminar con las desigualdades en las provincias, pero ya no se discutirán salarios a nivel nacional. Si se mueve el salario mínimo a mitad de año, también se correrá el piso docente», explicó la misma fuente del Ministerio de Educación de la Nación.
El Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil fijó en junio pasado el piso salarial en $9.500 a partir de enero. Por ende, el mínimo a partir del que negociar en las jurisdicciones es de $11.400. En tanto, en julio cuando aumente a $10.000 el SMVM tal como está previsto, pasará a ser $12.000 la base.