El ministro de Gobierno, Pablo Farías, evalúa pedir la conciliación obligatoria para frenar las huelgas dispuestas para el martes y miércoles que viene.
Para el gobierno de Miguel Lifschitz, «los docentes han adoptado una actitud claramente rupturista del diálogo» en la paritaria del sector, al lanzar una segunda tanda de medidas de fuerza, con otro paro de 48 horas para martes y miércoles próximos. El ministro de Gobierno, Pablo Farías, consideró que las medidas de fuerza decretadas por Amsafé «son absolutamente excesivas ante una oferta responsable que hizo la provincia. En otros distritos, con porcentajes idénticos o más bajos, los gremios han acordado la paritaria». El funcionario reiteró que se evalúa descontar los días no trabajados o bien pedir la conciliación obligatoria para volver el conflicto a foja cero.
En diálogo con LaCapital, Farías exteriorizó el malestar de la Casa Gris con los gremios docentes tras el rechazo a la última propuesta salarial en la reunión paritaria del viernes.
Ese día, los sindicatos que nuclean a los maestros de toda la provincia (Amsafé, Sadop, UDA y Amet) lanzaron un paro de 48 horas para martes y miércoles de la semana entrante por considerar insuficiente el aumento de 16 por ciento en tres tramos respecto a los salarios de diciembre último.
«El planteo de los gremios es exagerado, absolutamente excesivo», opinó el titular de la cartera política santafesina. «En el caso de los docentes, a diferencia de los estatales, se trata de una segunda tanda de paros en la segunda semana de iniciado el ciclo lectivo», agregó.
El funcionario santafesino resaltó que «con porcentajes similares o incluso más bajos, los gremios docentes de otras provincias han acordado sus paritarias. Así ha ocurrido en la provincia de Córdoba, en Entre Ríos e incluso en Mendoza, donde no hubo siquiera paritarias», puntualizó.
Farías remarcó que en la reunión del viernes «hubo una mejora real en la propuesta en base a parte de lo solicitado por los gremios, que era aumentar el incremento de arranque de la suba anual».
«El adelanto de un punto porcentual a marzo —continuó— puede parecer un dato menor, pero cuando se multiplica por miles de docentes y estatales, esto impacta en unos 430 millones de pesos. Hicimos un esfuerzo presupuestario para hacer este ofrecimiento».
Cuando se le preguntó al ministro de Gobierno cómo imaginaba que iba a continuar la negociación con la docencia, el funcionario respondió: «La verdad es que el escenario no es sencillo, los docentes han adoptado una actitud claramente rupturista del diálogo, con un plan de lucha muy intenso a poco de iniciarse las clases».
Farías reiteró que la gobernación «no tiene mucho margen para mejorar la oferta salarial. Podemos explorar alternativas, algunos cambios en el esquema de pagos, pero en términos porcentuales, estamos al límite».
En ese sentido, recordó que la ley de consenso y responsabilidad fiscal sancionada por el Congreso «fijó un tope para el denominado gasto corriente de las provincias, dentro de lo cual está la masa salarial, que no puede superar la inflación del período».
La inflación estimada por el gobierno nacional, «recalibrada» a fines del año pasado, se ubica en el 15 por ciento. «Si se supera esa meta, en Santa Fe ofrecimos sostener la cláusula gatillo para que se ajuste automáticamente el salario ante una eventual suba del costo de vida», agregó Farías.
El ministro de Gobierno aclaró que la gestión que encabeza Lifschitz «no está especulando en la negociación, ofreciendo menos de lo que puede. Hicimos una propuesta responsable, dentro de las posibilidades fiscales del Estado para no llevar a la provincia a problemas de déficit fiscal».
Farías ratificó que la gobernación evalúa «descontar los días no trabajados», como ya se planteó la semana pasada, que ya sumarían cuatro jornadas de huelga en lo que va del mes en curso.
Otra opción en danza es solicitar el dictado de la conciliación obligatoria al Ministerio de Trabajo provincial.
«En alguna oportunidad se recurrió a esa instancia en la paritaria docente y también lo han hecho recientemente los municipios y comunas para retrotraer el conflicto y así reabrir el diálogo. Mientras tanto, se garantizaría que no haya medidas de fuerza y que los chicos estén en las escuelas dictando clases como corresponde», apuntó el funcionario provincial.
También se vienen medidas de fuerza en la UNR
Los docentes de la Universidad Nacional de Rosario nucleados en la Coad se encuentran votando en todas las facultades y escuelas de la UNR para definir las medidas a elevar al congreso de Conadu a nivel federal.
La docencia fue convocada para mañana a la mesa de negociación salarial por parte de la Secretaria de Política Universitaria del gobierno nacional. Sin embargo, desde Coad advirtieron: «Sabemos que no harán ningún ofrecimiento concreto. Si así fuera, esta convocatoria sólo supone una apertura meramente formal y, por ello, ese solo gesto no modifica en nada la situación y el conflicto».
Los docentes de la UNR remarcaron que recién para el 20 de marzo Conadu convocó a un congreso, «una cita con mucho retraso considerando la urgencia por resolver los problemas y todo lo que ha ocurrido. Esa fecha, prácticamente, obligaría a estirar las definiciones y el plan de lucha para abril».