Los ministerios de Desarrollo Social y Educación firmaron un convenio con la Universidad Nacional de Rosario para abrir once espacios, en cinco unidades penitenciarias de toda la provincia. En su fase inicial alcanzará a 220 jóvenes.
En el marco del programa Nueva Oportunidad, los ministros de Desarrollo Social, Jorge Alvarez, y de Educación, Claudia Balagué, firmaron este jueves un convenio con el Programa de Educación en Cárceles de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario, para capacitar en oficios a jóvenes en cinco unidades penitenciarias de toda la provincia. En la fase inicial alcanzará a 220 jóvenes.
“Celebramos poder contribuir a consolidar el trabajo que la universidad viene haciendo en las cárceles con el programa Nueva Oportunidad, una política pública que impulsó el gobernador cuando asumimos la gestión y que se inició con 300 jóvenes en la ciudad de Rosario, mientras que hoy alcanza a 10 mil en toda la provincia”, sostuvo Alvarez.
“Con Nueva Oportunidad veníamos trabajando con jóvenes que habían pasado por situaciones complejas, incluso de encierro o consumo; y en esta ocasión, sumamos un nuevo espacio de intervención muy importante. Creemos que a través de este programa, se posibilita la integración social cuando el joven cumple su pena e, incluso, evita la reincidencia en el delito”.
“Muchos jóvenes tras finalizar la capacitación consiguen un empleo, o se embarcan en emprendimientos, y es lo que buscamos con este programa, profundizar la convivencia en la provincia”, concluyó el ministro.
Por su parte, el decano de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales de la Universidad Nacional de Rosario, Franco Bartolacci, destacó que “de todas las iniciativas que impulsamos desde la universidad todos estos años, esta es de las más relevantes. El programa de capacitación en cárceles que veníamos llevando adelante, encuentra en el programa Nueva Oportunidad una vía que posibilita activar múltiples herramientas”.
“En este sentido, creemos poder cumplir con el rol fundamental de la universidad, como plataforma y puente entre los diferentes niveles del Estado, para trabajar en red e impulsar dispositivos que generen una transformación social real, efectiva y contundente”.
El director del Programa Nueva Oportunidad, Luciano Vigoni, indicó que “la firma del convenio es la formalización e institucionalización de un trabajo que realizan, desde hace 10 años, organizaciones de la sociedad civil, pero creemos necesario que se enraíce como política pública. Lo central de este programa no está puesto solo en la capacitación sino en la reflexión, en la vuelta de estos jóvenes a la sociedad, que muchas veces resulta hostil y lejano. Por eso, este trabajo conjunto resulta importante y necesario. En este proceso, es vital destacar la tarea de los acompañantes en el tránsito de los jóvenes por esta experiencia; su dedicación, apoyo, amor y contención incondicional”.
IMPLEMENTACION DE LA CAPACITACIÓN
En articulación con el programa Nueva Oportunidad se dictarán, en una primera etapa, 11 capacitaciones durante el 2018. Las acciones se contemplan en un doble esquema de trabajo que consiste en Unidades Productivas y Unidades Culturales. Las mismas serán dictadas en la Unidad 3, Unidad 5, Unidad 6, Unidad 11y Unidad 16, dependientes del Servicio Penitenciario de la provincia de Santa Fe. Además, se sumarán dos capacitaciones que se desarrollarán en la ciudad de Rosario en articulación con la Dirección Provincial de Control y Asistencia Pos Penitenciaria.
Con la apertura de los 11 espacios de capacitación se estará ampliando el trabajo realizado por el programa Nueva Oportunidad, alcanzando una población total de 220 jóvenes en la fase inicial.
El trabajo con jóvenes privados de su libertad contempla un abordaje integral del equipo Nueva Oportunidad durante el proceso de condena, en la etapa de egreso y un seguimiento de los casos de Justicia Penal Juvenil en cárceles de adultos.
El esquema planteado para las capacitaciones tiene una Unidad Productiva, conformada por las capacitaciones en herrería, encuadernación, cosmética natural, textil y mosaiquismo (pos penitenciario). Con el objetivo futuro de focalizar en proyectos que consoliden la articulación adentro-afuera a través de emprendimientos sociales, cooperativas de trabajo, empresas sociales, y permitan la incorporación de personas privadas de su libertad, de personas pospenitenciarias y familiares.
La segunda unidad es la Cultural, que está conformada por las capacitaciones cuyos objetivos están centrados en la producción de capital simbólico. Se trabaja en disciplinas como la comunicación, filosofía, historia, bellas artes, psicología, audiovisual, antropología para luego plasmarlas en diversos soportes comunicacionales como producto de los procesos productivos, colectivos y creativos de cada taller.
EXPERIENCIA PREVIA
El Programa de Educación en Cárceles de la Facultad de Ciencia Política y Relaciones Internacionales, dependiente la Secretaría de Extensión, venía desarrollando acciones junto al colectivo La Bemba del Sur. Esta organización posee más de 10 años de experiencia en prácticas de intervenciones políticas, educativas, culturales y laborales en las cárceles del sur de la provincia de Santa Fe en distintas modalidades.
PRESENTES
De la actividad participaron los secretarios de Desarrollo Territorial, Jorge Elder, y de Juventudes, Pablo Lamberto; el subsecretario de Servicios Penitenciarios, Juan Manuel Martínez Salvia; los directores provinciales de Relaciones Institucionales de la secretaria de Asuntos Penitenciarios, Lucía Masneri, y de Control y Asistencia Pos Penitenciaria, Pablo Bufarini; representantes de las Unidades del Servicio Penitenciario 3, 5, 6, 11, y 16; la secretaria de Extensión de la Facultad de Ciencia Política y RR II, Paula Contino; y los representantes del Colectivo La Bemba del Sur, María Chiponi y Mauricio Machado; autoridades, provinciales y municipales; capacitadores y acompañantes, entre otros.