Aun el sector empresario no había terminado de digerir con desagrado las nuevas medidas económicas cuando empezaron a recibir una invitación oficial para este jueves para celebrar un acuerdo con el propósito de cuidar el empleo.
El Gobierno nacional sabe que las medidas que se están implementando tendrán un impacto negativo en la economía y en particular en el empleo. Con este objetivo está invitando a las principales entidades empresarias del país y a los líderes de la CGT a celebrar un «Acuerdo Marco Nacional para el cuidado del empleo, la productividad y el salario (ACEPROS)». La iniciativa la está motorizando el Ministerio de Trabajo y el Foro de Convergencia que agrupa a las principales entidades empresarias del país es quien está distribuyendo el borrador del acuerdo.
De acuerdo al documento al que accedió ámbito.com la intención oficial es que el acuerdo se lleve a cabo en la «Casa la Casa de Gobierno ubicada en la calle Balcarce N° 50 de esta Ciudad, se reúnen, en representación del ESTADO NACIONAL, el señor Presidente de la Nación Argentina Ing. Mauricio MACRI, acompañado por el señor Jefe de Gabinete de Ministros Lic. Marcos PEÑA y por los señores Ministros de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Lic. Jorge TRIACA y de Producción, Lic. Dante SICA; en representación de la CONFEDERACIÓN GENERAL DEL TRABAJO DE LA REPÚBLICA ARGENTINA (C.G.T. R.A.), los señores Secretarios Generales Dn. Héctor DAER, Dn Juan Carlos SCHMID y Dn. Juan Carlos ACUÑA; y en representación de (entidades empleadoras)».
La iniciativa tiene como propósito comprometerse a realizar un esfuerzo conjunto para mantener y elevar el nivel actual de empleo registrado».
Para ello y ante «los supuestos de reestructuración, recuperación productiva o crisis de empresa, el Estado Nacional, a través del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social llevará adelante las modificaciones normativas necesarias para mejorar la celeridad y eficiencia de los procedimientos respectivos».
En los considerandos del acuerdo se lee que «que tanto el Estado Nacional como los actores sociales presentes destacan la importancia del diálogo como instrumento indispensable para la elaboración e implementación de políticas consensuadas en materia de relaciones laborales». Asimismo, destaca que el diálogo ha sido productivo y lo demuestra al señalar «que tales consensos permiten el desarrollo de acciones concretas dirigidas a fomentar el crecimiento, como se ha verificado en la puesta en funcionamiento de mesas sectoriales pertenecientes a distintos ámbitos de la actividad económica nacional».
El llamamiento tanto a la dirigencia sindical como empresaria se basa en que el Gobierno «ha estimado conveniente avanzar en el establecimiento de compromisos recíprocos, destinados a proteger el empleo y favorecer la creación de nuevos puestos de trabajo».
En otro de los considerandos apela a la necesidad del «aumento de la productividad» pero también afirma «que tanto el empleo como la productividad no pueden concebirse como elementos desconectados de la evolución que registren los salarios que perciben los trabajadores, cuyo carácter alimentario y dignificante resulta innegable».
Finalmente apela a que «deben ser deben ser motivo de especial cuidado» (el salario y la productividad», y que por lo tanto «involucra necesariamente una invocación a la protección y a la solidaridad mutuas».
Con estos argumentos el Gobierno invitará a las entidades al compromiso de «realizar un esfuerzo conjunto para mantener y elevar el nivel actual de empleo registrado».
En otro artículo pide el compromiso a la «adopción de medidas concertadas para alcanzar un aumento de la productividad en los distintos sectores de la economía, especialmente las pequeñas y medianas empresas, a fin de promover la ubicación competitiva de los bienes y servicios argentinos en el mundo».
Para lograr este objetivo el Ministerio de Producción «llevará adelante las modificaciones normativas necesarias para mejorar la celeridad y eficiencia de los procedimientos que deban tramitar las empresas para exportar sus bienes y servicios».
Uno de los artículos plantea el compromiso de las partes a «establecer iniciativas que apunten a lograr una tendencia descendente de la inflación…, fenómeno que afecta el normal funcionamiento de la economía y el poder adquisitivo de los salarios». Asimismo recuerda que el trabajo conjunto se enmarca en el objetivo alcanzar el equilibrio fiscal proyectado, cumpliendo con las metas previstas de reducción del 2,7% para el año 2018 y de1, 3% para el año 2019.
Para lograr avanzar con la ejecución de este acuerdo se «constituye una Comisión Tripartita…. destinada a realizar un seguimiento periódico de la evolución del empleo, la productividad y el salario, pudiendo realizar las recomendaciones que estime pertinentes para lograr los objetivos aquí enunciados».
Tanto la composición y criterios del funcionamiento de la Comisión serán regulados por un instrumento específico (sin dar más detalles).
• Antecedentes
En abril/mayo del 2016 avanzaba en el Congreso la iniciativa de decretar una emergencia laboral producto de haber «una ola de despidos». Para impedir que prospere esta iniciativa el propio Mauricio Macri sugirió a los empresarios que firmen «voluntariamente un acuerdo para no despedir por 90 días». La iniciativa fue apoyada por unas 200 empresas que concurrieron al Salón Blanco de la Casa Rosada y rubricaron la iniciativa.
Sin embargo, los despidos continuaron según informó el Indec en el primer semestre hubo casi 120 mil despidos en el sector privado luego de agosto lo que obligó al Gobierno a volver a convocar a los participantes para la firma de un segundo acuerdo. Fue a mediados de noviembre de ese mismo año firmándose un nuevo acuerdo para que no haya despidos hasta marzo del año 2017. En esa oportunidad el encuentro fue presidido por el jefe de Gabinete, Marcos Peña y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca y el compromiso fue dentro del marco del segundo encuentro por el «Diálogo para la Producción y el Trabajo».
Este nuevo intento oficial de acordar preservar el empleo encuentra al sector productivo en un mal momento con una economía que no crece, elevadas tasas de interés, un dólar más caro, una inflación que se ubica cerca del 30%, y con una alta carga tributaria. Habrá que ver cuántos se comprometen a firmar esta iniciativa que a diferencia de los dos acuerdos pasados no pide medidas concretas.