Es imprescindible la unidad institucional para evitar una crisis de magnitud imprevisible frente al ajuste del Fondo Monetario Internacional.
Ante los anuncios del Gobierno Nacional para ejecutar sus compromisos con el Fondo Monetario Internacional, se requiere un amplio entramado de las representaciones políticas e institucionales, que conjuntamente con los sectores productivos, laborales y sociales generen una estrategia común para defender los recursos del conjunto de la sociedad santafesina.
Los acuerdos celebrados con ese organismo financiero, solo miden la reducción de los fondos que deberá ceder el Estado santafesino, pero que sin lugar a dudas traen como consecuencia un alto costo social evaluado en términos de recesión económica, caída de la producción, el empleo y de cualquier alternativa viable para el desarrollo sustentable de nuestra Provincia.
El recorte presupuestario exigido por el FMI, no solo se remite a la drástica disminución de partidas o transferencias de coparticipación -que por derecho le corresponden a Santa Fe como a sus Municipios y Comunas- sino también el impacto que esto provocará en servicios esenciales, salud, educación, vivienda, transporte y obviamente, sobre salarios y jubilaciones.
La poda prevista alcanza a los subsidios del transporte, Fondo de Incentivo Docente, Fondo Federal Solidario, FONAVI e increíblemente, recortes en planes sociales, supresión de jubilaciones, vacunas, medicamentos y seguridad alimentaria.
La ejecución de estas medidas de ajuste, que tienen por objeto principal costear el endeudamiento externo contraído por el Gobierno Nacional para financiar la fuga de capitales y la bicicleta financiera, será a costa del sacrificio indigno que se pretende someter a la mayoría de los santafesinos.
Desde nuestra Organización Sindical, hemos venido -desde hace meses- advirtiendo tanto al Poder Ejecutivo, Legisladores, Intendentes y Presidentes Comunales, las consecuencias que tendría la aprobación del Pacto Fiscal y su repercusión sobre las finanzas públicas. Esto demuestra que el denominado Consenso Fiscal, firmado bajo coerción por algunos Gobernadores y aprobados por las Legislaturas, constituye el desmantelamiento del Federalismo como modelo republicano y el cercenamiento de las Autonomías para instrumentar -sin resistencia institucional- una devastación social de nuestros pueblos.
En la realidad concreta de las comunidades santafesinas ya se empieza a observar el impacto de los Acuerdos con el FMI en la vida cotidiana. Allí las obras públicas se detienen, los Intendentes y Concejales empiezan a expresar con claridad las dificultades para afrontar el funcionamiento normal de sus administraciones, y el panorama para los próximos meses es desolador.
Por lo expuesto, exigimos a los hombres y mujeres con responsabilidades institucionales, como el Gobernador de la Provincia, Legisladores nacionales y provinciales, Intendentes, Concejales y Presidentes de Comunas, la Convocatoria a la unidad del conjunto de los sectores de la comunidad santafesina para evitar este latrocinio en víspera de su ejecución.
Los trabajadores estamos dispuestos a acompañar esa iniciativa, la que reclamamos en legítima defensa de los intereses de nuestro pueblo, para no permanecer resistiendo el ajuste en el marco de una paz social que comienza a deteriorarse.