Uno de los hombres más poderosos del norte santafesino en la anterior gestión socialista deberá estar detenido en su casa. Es por violar las restricciones judiciales que le habían impuesto.
Pablo Zancada, el hombre más poderoso de los años fuertes del inicio del socialismo en el poder donde incluso llegó a ser Diputado Nacional, deberá estar encerrado en su casa por no respetar al poder judicial.
Zancada decidió, a sabiendas de los riesgos, burlarse de la justicia y de la decisión del Juez Gonzalo Basualdo. En tribunales aseguran que cuando Reconquista.com.ar dio a conocer los audios de Zancada comunicándose con Nicolás Paniagua el juez estalló de ira. El socialista se había burlado de su decisión y de todo el poder judicial.
Tal vez acostumbrado a los tiempos de «hombre intocable» se animó a contactarse y a pedir un encuentro con el denunciante para «charlar» sobre la causa y procurar un acuerdo.
Los abogados querellantes y el fiscal entendieron que era momento de que Zancada vaya «tras las rejas» pero luego de largas discusiones desistieron de la decisión y arribaron a un acuerdo «para mantener la paz social» llevando al imputado detenido en su propia casa.
Zancada tendrá salidas transitorias a su trabajo (ida y vuelta) pero no podrá siquiera ir a un supermercado a hacer las compras familiares. Si alguien lo viese en la calle o en algún otro lugar que no sea en su empresa podría ser denunciado y la justicia no tendrá otra opción que llevarlo a un centro penitenciario común.
