El oficialismo en Diputados logró ayer dictamen de mayoría favorable al paquete fiscal que incluye el revalúo de Ganancias por inflación, la reforma del impuesto a los bienes personales y la «adenda» al Consenso Fiscal.
El oficialismo en Diputados logró ayer dictamen de mayoría favorable al paquete fiscal que incluye el revalúo de Ganancias por inflación, la reforma del impuesto a los bienes personales y la «adenda» al Consenso Fiscal.
Se trata de una batería de proyectos que el gobierno pactó con los gobernadores para blindar el presupuesto 2019 ya que son medidas que apuntan a aumentar la recaudación de la Nación y las provincias para compensar los ajustes que impone a las distintas jurisdicciones la llamada ley de leyes.
El Frente para la Victoria se opuso a las tres iniciativas, mientras que el Frente Renovador avaló sólo el revalúo, y el bloque Justicialista acompañó los tres proyectos, con la excepción de Diego Bossio, quien sólo firmó el de revalúo, en consonancia con el massismo.
La reforma de Bienes Personales incluye un alza progresiva de la alícuota a medida que aumenta el patrimonio, mientras casi duplica el mínimo no imponible (pasa de $1.050.000 a $2.000.000). Para Marcos Lavagna ese piso sigue siendo muy bajo y «golpea» a la clase media, ya que equivale a poco más de 50.000 dólares, «menos que un departamento de un ambiente en Capital Federal».
Por otra parte, se reponen los gravámenes a los inmuebles rurales por Bienes Personales, que estaban exentos. El año pasado el Congreso había modificado la ley de Ganancias a fin de habilitar a las empresas a ajustar sus balances a la inflación por única vez cuando el Indice de Precios Internos al por Mayor (Ipim) superara el 100 por ciento en tres años, o cuando en cada período se superara el 33 por ciento anual.