Una pequeña vivienda, ubicaba en Arronga y Corrientes, se consumió casi totalmente en minutos y los Bomberos Zapadores de la UR XIX lograron apagar las llamas que aún quedaban en la parte frontal construida de mampostería.
El foco ígneo se inició en la parte trasera donde el material de construcción podría haber sido más inflamable, por la rapidez conque se propagaron las llamas.
Su único morador, un conocido anciano español, logró salir y ayudado por los vecinos trataba de salir del shock inicial.
Resta ahora realizar las pericias para establecer las causales que afortunadamente solo provocó el daño material.
Fuente: FM Vida