El abogado Gabriel Hernández, que tiene prisión domiciliaria (con salidas laborales, académicas y hasta de entretenimiento) dio una conferencia de prensa en su casa para dar su versión del caso donde su hijo es la víctima.
Hernández convocó a la prensa en la tarde de este miércoles y habló por más de media hora con los periodistas. Allí hizo referencia a la causa judicial donde se lo investiga por la violencia familiar contra su propio hijo y por el cual estuvo detenido en Avellaneda y desde la audiencia de medidas cautelares está con prisión domiciliaria.
Dijo que hay intereses para desacreditarlo y «decir que soy un mal padre». Apuntó a la madre diciendo que busca un rédito económico porque «tuvo un hijo con otra persona y no tiene trabajo y tal vez (nombra al hijo) sea la tarjeta de crédito que facilite las cosas».
El imputado considera que su ex pareja está asesorada por «el terrorismo institucional que hay en Reconquista» y le pidió a todos los padres y madres solteras a los que les quitan los hijos que los «defiendan de la corrupción».
También apuntó a la escuela y asegura que hay una persecución en su contra porque él siempre defendió a su hijo frente a los abusos que sufría y hasta habló de una oportunidad en la que «le bajaron el pantalón en la misma escuela que ahora me hace esto».
«Hay directivos que se creen dueños de las escuelas y deberían ser servidores públicos», disparó haciendo referencia a la escuela donde asiste su hijo y que detectó al chico que llegaba golpeado y que denunció que en una oportunidad el chico fue a la escuela con una zapatilla ropa y pegada con cinta engomada.
También habló de «intereses ideológicos» porque el trabaja en causas de lesa humanidad y «me persiguen con eso».