Tras negarse en un primer momento a apoyar la iniciativa, el oficialismo acompañó finalmente el proyecto que había sido consensuado por la oposición.
Con 222 votos afirmativos, 1 abstención y ningún voto negativo la Cámara de Diputados dio media sanción este jueves a la Ley que declara la Emergencia Alimentaria en todo el territorio nacional.
Luego del pedido de Nicolás Del Caño (FIT) para tratar otros temas durante la sesión parlamentaria, Daniel Arroyo (Red por Argentina) afirmó: «Estamos hablando de una ley que ayudar a ponerle un piso a la caída social, es evidente que hay un problema de hambre en Argentina, hay un problema de malnutrición». «Estamos ante una etapa difícil, nadie tiene que encender la mecha, nadie tiene que tirar la piedra», agregó.
Por su lado, Héctor «Toty» Flores (Cambiemos) afirmó que el oficialismo acompañará el proyecto, aunque afirmó no «coincidir con la magnitud de la situación que se está viviendo». «Es necesario acompañar a la gente que está sufriendo con la crisis cambiaria del año pasado y que se ha profundizado con la crisis post PASO», señaló.
A su vez, recordó: «Pasaron varios Gobierno desde la declaración de la Emergencia Social, 18 años en la Argentina, donde no se resolvió el problema de la pobreza estructural que este gobierno, con las obras que está haciendo, cloacas, asfalto, lo venía haciendo en los dos primeros años de gestión». «Hubo emergencia social cuando la economía no crecía y hubo emergencia social cuando crecía a tasas chinas y el precio de la soja era de 600 dólares», agregó.
Luego se manifestaron los diputados Juanjo Bahillo (PJ, Entre Ríos) y Carlos Castagneto (PJ bonaerense), Alejandro Ramos (Primero Argentina) y Cecilia Moreau (Frente Renovador), quién aseguró: «El modelo de concentración económica no fue una cadena de errores, sino un plan sistemático de aniquilamiento de las clases medias y más humildes y no alcanza con beneficencia».
También Leonardo Grosso (Movimiento Evita), Victoria Donda (Somos), Del Caño. «No nos engañemos, lo que se va a pagar este año de intereses de la deuda equivale a 40 veces las políticas alimentarias en Argentina, hay algo que no cierra para las mayorías populares», afirmó el diputado del Frente de Izquierda.
Y agregó: «No es como dice el candidato del Frente de Todos (Alberto Fernández) que hay que evitar las calles, sino todo lo contrario, es el único medio para conquistar las demandas. Nos quieren engañar diciendo que ahora hay que quedarse tranquilos, que hay que aceptar la situación a la que nos ha llevado este Gobierno y sus cómplices». En el mismo sentido se manifestó Romina del Plá.
La iniciativa, que se consensuó en base a más de diez proyectos presentados por diferentes bloques, plantea la prórroga del decreto 108 firmado por Eduardo Duhalde en 2002 y que se extienda hasta el 31 de diciembre de 2022 la Emergencia Alimentaria Nacional e impulsar la creación del Programa de Alimentación y Nutrición Nacional.
En la previa del debate parlamentario, la diputada Graciela Camaño recordó que el país viene con una economía deprimida en un contexto inflacionario que, luego de la fuerte devaluación post las PASO, provocó el ingreso a la pobreza y a la indigencia de muchos argentinos.
«Hoy se conoce la inflación. Se prevé entre un 4 y un 5. Realmente hay una depreciación de los ingresos. Si se supone que la gente con 30 pesos puede comer, me parece que estamos viviendo en otro país. Los datos son concretos: hace 17 años estamos en emergencia alimentaria», lamentó.
En el tramo final de la sesión, hablaron los presidentes de los bloques. «La cara más cruel de la crisis es la de los que menos tienen. Hoy estamos dando una respuesta por parte del Estado a una demanda creciente que ha sido solicitada por diferentes sectores sociales», sostuvo Agustín Rossi.
Poco antes, el salteño Pablo Kosiner, del bloque justicialista dijo que «no es ilógico pensar que estemos en una emergencia alimentaria porque es una consecuencia lógica de la falta de crecimiento en Argentina y de un plan económico que ha fracasado».
Marco Lavagna también brindó su posición y aseguró que en Argentina «pasamos a naturalizar la pobreza que tenemos» y que «la pobreza estructural hoy está por encima del 30%». En esa línea, agregó: «El 50% de los chicos que hoy nacen en Argentina, nacen en hogares pobres».
A través del mencionado proyecto se establece «un incremento de emergencia como mínimo del 50% de las partidas presupuestarias vigentes del corriente año correspondientes a políticas públicas nacionales de alimentación y nutrición», indicaron fuentes parlamentarias.
Además, faculta a la Jefatura de Gabinete, «a partir del 1 de enero del año 2020 y hasta que dure la emergencia, a actualizar trimestralmente las partidas presupuestarias correspondientes a políticas públicas nacionales de alimentación y nutrición».
El pedido de sesión especial fue firmado por los presidentes de los bloques del Frente Para la Victoria, Agustín Rossi; de Red Argentina, Felipe Solá; del Movimiento Evita, Leonardo Grosso; del Frente Renovador, Carla Pitiot; de Somos, Victoria Donda, y de Nuevo Espacio, Alejandra Rodenas, todos las cuales a nivel electoral integran el Frente de Todos.
También suscribieron la solicitud el presidente del bloque Argentina Federal, Pablo Kosiner; Jorge Franco, del Frente de la Concordia Misionero e Ivana Bianchi de Unidad Justicialista, entre otros.
El interbloque Cambiemos terminó de definir su estrategia en una reunión ayer por la tarde, en la que se repasaron diferentes escenarios de la que será la vuelta a la actividad del plenario de la Cámara tras dos meses y medio de inactividad. «Vamos a ir a la sesión aunque nos parece sobreabundante aprobar esta ley, ya que la emergencia del 2002 está vigente», señaló un diputado radical.