Se trata de Alejandro Manuel Cañete de 33 años y la víctima es menor de edad. La pena fue impuesta por el juez Mauricio Martelossi en un juicio oral que finalizó el miércoles en los tribunales de Reconquista. El fiscal que estuvo a cargo de la investigación es Aldo Héctor Gerosa.
Un hombre de 33 años identificado como Alejandro Manuel Cañete fue condenado a nueve años de prisión como autor de delitos contra la integridad sexual cometidos entre 2005 y 2016 en la ciudad de Reconquista en perjuicio de la hija menor de edad de su expareja. Así lo dispuso el juez Mauricio Martelossi en el marco de un juicio oral que finalizó el miércoles en los tribunales reconquistences.
Cañete fue condenado por ser autor penalmente responsable del delito de abuso sexual con acceso carnal agravado (por el aprovechamiento de la situación de convivencia con una víctima de edad) en un número indeterminado de veces, en concurso real con la autoría del delito de abuso sexual gravemente ultrajante calificado (por el aprovechamiento de la situación de convivencia con una víctima menor de edad).
El fiscal que investigó los hechos es Aldo Gerosa, quien luego de finalizado el juicio se mostró conforme con la pena impuesta y subrayó que “el resultado es una muestra del trabajo que venimos realizando desde la Fiscalía en este tipo de casos”. Por otra parte, “valoramos la decisión del magistrado y aguardaremos sus fundamentos para analizar los motivos por los cuales impuso una pena de nueve años”.
Convivencia
Gerosa recordó los hechos ilícitos investigados y sostuvo que “el acusado abusó sexualmente durante años de la hija menor de edad de su pareja –con quien también tuvo otros hijos en común”. También precisó que “la víctima, que estaba en edad escolar al momento del primer abuso, era una niña totalmente vulnerable. A pesar de ello, el condenado la sometió a las agresiones sexuales”.
“Para consumar los abusos, el condenado se aprovechó de la convivencia con la niña y de que la madre de la menor viajaba muy seguido a la ciudad de Santa Fe por cuestiones de salud de los hermanos de la víctima”, detalló el fiscal Gerosa.
El funcionario del MPA concluyó que ”el accionar de Cañete implicó una gravísima violación a a los Derechos Humanos elementales de una víctima menor de edad, y a los deberes de convivencia y éticos propios de este tipo de relaciones afectivas familiares tan estrechas o cercanas”.
Denuncia
El fiscal explicó que “la investigación se inició a raíz de una denuncia radicada por la propia madre de la víctima y pareja del condenado”. Gerosa concluyó que “la mujer informó que vivía con Cañete hacía 12 años, y que inmediatamente después de enterarse de lo que había ocurrido con su hija, informó los hechos en sede policial”.