Desde el Comité de Emergencias del Departamento San Cristobal pidieron al Ejecutivo que flexibilice ciertas actividades económicas para evitar el colapso de la estructura productiva.
El pasado sábado 2 de mayo, el Comité de Emergencias del Departamento San Cristobal mantuvo un encuentro en el que participaron los intendentes de Ceres, San Cristóbal, San Guillermo y Suardi, junto a Centros Comerciales, Industriales y Rurales, acompañados por el Senador Provincial Felipe Michlig y el Diputado Provincial Marcelo González, con objeto de analizar nuevas medidas para las localidades en el marco de la pandemia del COVID-19.
La reunión derivó en un petitorio dirigido al gobernador de la Provincia, Omar Perotti, solicitando la flexibilización de una serie de actividades y servicios, “como forma de evitar el colapso total de la estructura productiva de nuestras ciudades y, así, poder superar –en parte-, los problemas socioeconómicos derivados de la pandemia”, señala el documento.
Dado que no se han registrado casos de coronavirus en el departamento ubicado al norte santafesino, se propuso al Ejecutivo la flexibilización de actividades económicas para evitar el colapso de la estructura productiva y comercial en ciudades con menos de 20.000 habitantes.
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“Estamos ante un falso dilema salud/economía. Podemos seguir cuidando la salud y atender la economía que se nos está muriendo. El 72 por ciento de las empresas tienen caídas de ventas mayores al 60 por ciento, dentro de ellas, el 65 por ciento son empresas no exceptuadas y el 35 exceptuadas”, detalló a CADENA OH! Felipe Michlig.
Según el Senador Provincial, existe una predisposición para que la economía vuelva a funcionar pero falta decisión política del gobierno ya que se evidencia cierto temor a la hora de tomar decisiones: “Nosotros acompañamos la cautela, pero ha llegado el momento de buscar el equilibrio, quién puede estar en contra de cuidar la vida, pero con las medidas de prevención y la fiscalización podemos comenzar a flexibilizar“, señaló el legislador.
Para Michlig es necesario consolidar un sistema de controles que esté solventado en el compromiso de los comerciantes a respetar los protocolos: “No podemos seguir en esta situación, hay empresas que no van a poder seguir adelante. Lo que pretendemos es salvarlas y que aquellas que se han caído empiecen a funcionar”, razonó.
