Ejecutivos de Air France y KLM, dos de las tres aerolíneas que comenzarán a operar vuelos semanales a Europa a partir de julio, dieron detalles sobre cómo será la operación
Ejecutivos de Air France y KLM, dos de las tres aerolíneas que comenzarán a operar vuelos semanales a Europa a partir de julio, realizaron hoy una conferencia de prensa virtual en la que dieron detalles sobre cómo será la operación. Según aseguraron, podrán viajar al exterior no solo europeos o residentes en Europa sino argentinos con doble ciudadanía y personas con visa de estudio o trabajo.
La operación será inaugurada por KLM, que tiene su primera partida desde Buenos Aires programada para el 1 de julio. Luego volará el 8, el 15, el 22 y el 29 de julio y el 5, 12, 19 y 26 de agosto. Por otra parte, el primero de estos vuelos a París operado por Air France saldrá de Ezeiza el 5 de julio y los seguirán los del 14, 21 y 30 de julio y los del 6, 13, 20 y 27 de agosto.
Según aseguraron los ejecutivos de las dos aerolíneas -que integran un mismo grupo económico- los pasajes están disponibles desde hoy a las 10 de la mañana y pueden comprarse en las páginas oficiales de las aerolíneas, en todas las oficinas de venta de las aerolíneas, en los call center y en las agencias de viajes argentinas.
Si bien prefirieron no precisar montos, aseguraron que las tarifas estarán regidas por «el principio habitual». «Habrá tarifas más baratas en la apertura de los vuelos y después, dependiendo de la disponibilidad, los precios cambiarán. Es el mercado el que dispone el nivel de precio y yo tengo dificultad para pensar que va a aumentar. Más bien, creo que podría acontecer lo contrario», sostuvo Jean-Marc Pouchol, director general de Air France/KLM para Brasil y el Cono Sur.
Los ejecutivos resaltaron que «las fronteras continúan cerradas», por lo que los vuelos no son abiertos a turistas ni se los puede definir como «vuelos comerciales». Sin embargo, precisaron que no solo podrán viajar desde Buenos Aires al exterior europeos o personas con residencia en Europa sino argentinos que tengan también una ciudadanía europea o aquellos con una visa de trabajo o estudio en el viejo continente.
«Las personas con doble nacionalidad, que en la Argentina son muchas, pueden viajar a Europa y pueden conectar en el aeropuerto de París o Amsterdam con otros destinos europeos. El tránsito en esos aeropuertos está autorizado si el cliente tienen un billete», precisó Pouchol.
Respecto de quiénes pueden ingresar al país, las restricciones siguen siendo las mismas: solo argentinos o residentes argentinos, que al llegar deben cumplir con 14 días de cuarentena obligatoria.
«El objetivo de este programa es dar la previsibilidad a toda esta gente que está esperando, que no sabe cuándo va a haber un vuelo», dijo Nathalie Larivet, gerente general de Air France KLM para la Argentina, Bolivia, Paraguay y Uruguay. Respecto de la ocupación esperada, los ejecutivos señalaron que los 21 vuelos de repatriación que coordinaron con el gobierno argentino hasta el momento tuvieron los asientos completos, lo que les da la pauta de que será buena. «Los nuevos vuelos ya están disponibles, vamos a ver cómo se venden. Hay mucha presión, muchas personas que quieren volver a casa pero el cierre de fronteras limita la demanda», apuntó Larivet.
Antes de que se iniciaran las restricciones aéreas por la pandemia de coronavirus, Air France y KLM habían alcanzado las 14 frecuencias semanales a la Argentina, la mayor frecuencia histórica en el país. Todavía no está definido cuántas se reanudarán en septiembre, una vez que caiga la restricción para los vuelos internacionales. Según señalaron, el objetivo es alcanzar los niveles previos a la crisis de la pandemia, pero dependerá de cómo evolucione el mercado.
A nivel general, los ejecutivos señalaron que la crisis vinculada al coronavirus «fue un choque tremendo para la aviación en general y para el grupo Air France/KLM en particular», que los obligó a recortar el 97% de las operaciones en las primeras semanas.
Según detalló Pouchol, a partir de mayo se empezaron a retomar algunos vuelos y actualmente el grupo opera poco más del 15% de los que tenía antes de la crisis. Se prevé que durante los meses de julio y agosto recuperen entre el 35% y el 40% de la programación habitual y alcancen para fin de año alrededor del 70% al 75% del nivel de operaciones previo a la pandemia.
«Después, gradualmente, esperamos continuar con la recuperación en 2021 y retomar el 90% de la operación. Lo que ocurra va a depender del nivel de demanda que haya para viajar y esa demanda va a depender de la evolución de la situación sanitaria. Por eso es un desafío grande hacer proyecciones», matizó Pouchol.
En cuanto a las medidas sanitarias, la empresa señaló que para volar en Air France y KLM será obligatorio el uso de tapabocas tanto para el personal como para el pasajeros. Además, se deberá respetar el distanciamiento físico en todo el recorrido del cliente por el aeropuerto y se tomará la temperatura de los pasajeros que vayan a abordar el avión.
Fuente: la nación.
