Fabián Lorenzini tuvo un pico de estrés. El juzgado que tiene la convocatoria de acreedores más grande de la Provincia está momentáneamente acéfalo, pero siguen los trámites en marcha.
El juez del caso Vicentin, Fabián Lorenzini, pidió licencia médica por un pico de estrés y la mayor convocatoria de acreedores de Santa Fe momentáneamente no tiene quien la conduzca.
El magistrado informó la semana pasada que tuvo un pico de estrés y que el trabajo que le significó seguir el caso Vicentin perjudicó su salud. Por ahora, el juzgado de Reconquista está temporalmente acéfalo. No se espera que la convocatoria vaya a cambiar de juzgado, según entienden en la sindicatura del concurso.
Luego de la noticia, los abogados de acreedores que habían intentando en un principio llevar la causa a los tribunales de Rosario -argumentando que en el norte provincial no había los recursos humanos suficientes para afrontar una causa tan compleja- afirmaron que “era esperable que esta complicación surgiera”.
Para que no se detenga formalmente el concurso, otros funcionarios del poder judicial tomaron algunos trámites. Por ejemplo, desde la sindicatura del concurso informaron que un juez de otra nominación -la tercera- definió extender dos semanas más al plazo para presentar impugnaciones sobre avales presentados en la verificación de créditos.
