El jefe de la Unidad Fiscal de Delitos Complejos, Dr. Miguel Moreno, se mostró convencido que Vicentín armó una gran estafa que perjudicó a bancos nacionales y extranjeros, a productores y acopiadores de granos, por cifras siderales, de las que adelantó algunos montos: 500 millones de dólares los bancos internacionales mas el MACRO; más de 50 millones de dólares el Grupo Grassi s.a.; y entre 7 y 8 millones de dólares otro grupo de cerealeros.
Para determinar los autores, debe identificarlos con nombre y apellido según las decisiones que fueron tomando y los contratos firmados mediante un ardid engañoso que consistió en brindar información falsa en los balances, exhibiendo una magnitud muy importante de contratos para demostrar una salud financiera que no era tal.
¿Cómo era la maniobra?. Vicentín recibía granos que en los balances hacía figurar como propios, sin exhibir que todavía no los había pagado, por lo tanto no eran activos de la empresa, sino pasivos corrientes. Considera que también la Bolsa de Comercio fue utilizada como un escenario para exhibir lo que ya no era.
En conferencia de prensa brindada este jueves 17 de diciembre de 2020, el director de la investigación informó que la causa se inició por denuncia de productores agropecuarios que entregaron granos y cereales a Vicentín saic y no pudieron cobrar. Consideran que fueron estafados porque al momento de contratar, no fueron informados por Vicentín de la situación de la empresa. También están convencidos que Vicentín recibía los granos sabiendo que no iba a poder honrar la fe comercial.
Respecto a los allanamientos, informó que fue para buscar pruebas para demostrar la comisión delictiva e identificar a los autores. En esa dirección, secuestraron información física y digital, y siguen aún extrayendo información de las computadoras. Buscan información sobre operaciones y decisiones societarias. Para eso además secuestaron libros de actas de las diferentes sociedades que forman el holding Vicentin, ya no solo Vicentín saic, coincidentemente con la sospecha de los denunciantes, que consideran que directores de Vicentín armaron la gran estafa formando empresas offshore y fueron vaciando a Vicentín saic, que era la que se endeudaba detrás de su prestigio que acuñó durante 90 años.
Sobre la clausura de las oficinas, el Dr. Miguel Moreno explicó que fue para trabajar sobre una caja fuerte que lograban abrir; y sobre terminales informáticas a cuya información no podían acceder aún por «la falta de colaboración» del personal de Vicentín.
«Creemos que las estafas ocurrieron», pero siendo una sociedad, hay que identificar a los autores, la responsabilidad de cada persona, explicó el funcionario del Ministerio Público de la Acusación, convencido que de las últimas medidas ordenadas por el juez penal Hernán Potsma, van a surgir los sospechosos a quienes oportunamente va a imputar.
Adelantó que entre los sospechosos están «todos los integrantes del directorio en los dos años previos al Concurso de Acreedores, integrantes del directorio, síndicos, representantes legales que firmaron contratos con bancos y corredores agropecuarios». No quiso adelantar nombres.
¿Habrá detenciones?. Nadie le preguntó eso al Dr. Moreno en la conferencia de prensa, pero el fiscal puede decidir eso en cualquier momento si es que lo considera necesario para evitar riesgos procesales, si cree que estando en libertad los sospechosos pueden obstruir la investigación, y si considera que hay riesgo de fuga; y a partir de esa decisión debería presentar a los detenidos ante el juez para comunicarle los hechos por los que son investigados y la calificación provisoria para que el juez decida sobre la legalidad de la detención y sobre las medidas cautelares que requiera el fiscal, en ese caso, la posible prisión preventiva. La otra opción que tiene el fiscal es avanzar con el proceso en estado de libertad, para evitar los plazos que se aceleran cuando hay medidas privativas de la libertad.