Elevaron una nota a la Ministra de Educación. Pidieron acortar módulos y recreos.
A menos de una semana del inicio de clases presenciales en la provincia de Santa Fe, un grupo de científicos y profesionales de la Salud pidieron que sean reevaluados algunos aspectos de los protocolos sanitarios dispuestos por el Gobierno.
Tanto expertos del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina (CONICET) como de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) le enviaron una carta a la ministra de Educación, Adriana Cantero, para solicitarle la urgente revisión de los módulos para fragmentarlos en clases de 45 minutos y recreos de 10 minutos.
La carta lleva la firma de Cristina Carrillo, ex presidenta de la Sociedad Argentina de Investigaciones Clínicas, y de la ex ministra de Salud provincial, Andrea Uboldi, además de otra decena de científicos integrantes del Centro Internacional Franco Argentino de Ciencias de la Información y de Sistemas (CIFASIS)
Para los investigadores, el principal déficit de la vuelta a las aulas pasa por el establecimiento de módulos de 90 minutos de clases con un único un recreo de media hora, por lo que propusieron avanzar en módulos que no superen los 45 minutos, con recreos cortos de 10 minutos, que permitan garantizar la ventilación de los espacios.
Aumentar el tiempo de permanencia en los recintos, «va en contra de la principal recomendación para prevenir el contagio y pone en serio riesgo a docentes y alumnos, al forzarlos a estar en un sitio donde probablemente se acumulen aerosoles«, afirmaron.
Se trata de las «gotitas microscópicas que emitimos al respirar, al hablar, al toser, y que por su pequeño tamaño tienen la capacidad de permanecer suspendidas en el aire durante varios minutos e incluso horas. El contagio por esta vía (denominado contagio por vía aérea) se da cuando una persona inhala aerosoles exhalados por una persona infectada».
Además, subrayaron que «estudios científicos realizados desde hace varios meses muestran evidencia concluyente sobre el rol predominante de los aerosoles en la transmisión del SARS-CoV-2, sugiriendo que al menos el 80 por ciento de los contagios tienen lugar por esta vía».
En la nota, los profesionales recordaron que «al momento de elaborarse los primeros protocolos sanitarios, este hecho era desconocido y se pensaba que el virus se transmitía por superficies contaminadas o por gotas grandes que alguien emitía al toser o estornudar. Hoy en día, dichos mecanismos de contagio si bien no se descartan, serían mucho menos frecuentes en comparación con la alta probabilidad de transmisión observada a través de aerosoles».
“Nuestra propuesta es acortar los módulos a 45 minutos, con recreos cortos de 10 minutos. Esto permite garantizar mucho mejor la ventilación de los espacios reduciendo sensiblemente las posibilidades de contagio y además, brinda la posibilidad de desfasar los períodos de clases y recreos en 10 minutos entre distintos grados, dividiendo en dos o tres grupos”, indicaron.