El intendente de Avellaneda se transformó en uno de los grandes ganadores de las elecciones legislativas.
Profeta en su tierra, con el 80 por ciento del apoyo de sus coterráneos, el actual intendente de Avellaneda, Dionisio Scarpín, saltará sin escalas del Ejecutivo municipal al senado de la nación. Con 729.076 votos obtenidos, lo que representa el 40,31 por ciento del padrón electoral, Juntos por el Cambio logró imponerse en las elecciones legislativas e ingresar dos senadores al recinto.
Tenaz defensor de la propiedad privada, Scarpín saltó a boca de todos ante la posibilidad que el Gobierno nacional avanzara con una posible expropiación de Vicentin. Su experiencia en la gestión municipal, sumado a la presidencia del foro de intendentes durante cinco años, lo catapultó para conformar una fórmula con Carolina Losada y romper una hegemonía Justicialista en el senado nacional desde el 83 a la fecha.
“Estos desafíos que presenta la vida hay que asumirlos con muchas ganas. Soy de ir creciendo y cerrando etapas. Dejar la intendencia me va a generar mucha nostalgia, porque al municipio lo conozco desde que recuerdo. Mi viejo era intendente y yo lo acompañaba desde que tenía unos 11 años. Pero, laboralmente, cuando me toque, cerraré la etapa de la ciudad y empezaré una nueva que me ha regalado la vida”, dijo Scarpín al aire de Cadena OH!.
“No soy una persona -continuó- que le gusta estar sentado en una misma silla tanto tiempo, porque no puede crecer ni deja crecer. Si uno se queda tantos años como intendente no crece personalmente y los que vienen atrás de uno también se van desinflando”, sostuvo.
Senado nacional
Bajo la intención de continuar con la metodología de campaña, Scarpín afirmó que su trabajo en el senado nacional no implicará una desatención del territorio y de la demanda ciudadana. “No quiero ser como los senadores actuales que no han tenido un recorrido territorial. Quiero tener más diálogo con las instituciones, con más contacto con presidentes de comunas e intendentes, sean de Rosario o Gato Colorado”, aseguró.
“Es importante que el senador tenga vínculo con la sociedad santafesina. Uno no puede tener contacto con los tres millones de santafesinos, pero para eso hay instituciones que representan a los distintos sectores y ahí es donde debemos estar, con contactos periódicos”.
En simultáneo, el futuro senador nacional adelantó que, en los departamentos del norte provincial como 9 de Julio, San Javier, Vera y General Obligado, pretende desplegar un trabajo de campo a fin de articular acciones y poner en agenda nacional temas prioritarios. “Que una población del departamento 9 de Julio tenga que recibir agua potable de un camión que viene desde Reconquista, evidencia que en algo estamos fallando. En departamentos tan lejanos quiero trabajarlos de manera más específica. Luego aparecen los temas de las ciudades más grandes, como la inseguridad, los juzgados federales o el subsidio al transporte, entre otras problemáticas que vamos a tocar”, aseguró.
Alianzas opositoras
Pocas horas después del cierre de los comicios, el tablero político santafesino no tardó en mover sus primeras piezas. El intendente de Rosario y el de Avellaneda se retrataron juntos, hecho que reflotó la vieja idea de crear frentes nuevos y más amplios.
Scarpín reconoció conocer a Javkin desde su época de militancia, pero, además, el recorrido político y tantos años en la arena de campaña, los cruzó en un sinfín de oportunidades. “Con Pablo nos tocó luchar contra el intento de privatización de la universidad pública. Desde que él es intendente de Rosario hemos tenido muchísimas reuniones. Pablo es el intendente de la ciudad más grande que tiene Santa Fe y tiene un peso específico. La reunión de ayer con él, fue con intención de coordinar temas a trabajar en el futuro, siendo yo senador nacional”, dijo el mandatario de Avellaneda, quien además convalidó la necesidad de que la oposición trabaje unida para construir una alternativa de gobierno con miras al 2023.