Cuando viajamos a un lugar lejos de casa, lo ideal sería no tener que estar escatimando en gastos y poder vivir cómodos incluso dándose gustos. Disfrutar de los lugares y de lo que tienen para ofrecernos sin estar preocupados por el dinero. Pero esto no es una realidad que todos puedan vivir de forma sencilla. A veces, el esfuerzo de realizar el viaje es tan grande que tenemos que hacer algo extra para economizar algún gasto. El problema está en cómo hacerlo de la mejor manera. A continuación, compartimos cinco buenas ideas que pueden generar un impacto positivo en nuestras finanzas cuando estamos de viaje.
1. Alquilar un auto para movernos
Esta opción es sumamente conveniente. Si bien al principio nos puede generar dudas, rápidamente podremos observar los resultados en el análisis de nuestras finanzas. Los servicios de rent a car son ideales para moverse por una ciudad nueva y tener un gasto a consciencia.
De esta manera, podremos medir exactamente cuánto gastamos en traslado y de acuerdo a eso organizarnos. Además, el alquiler de un auto sin dudas será un alivio al no tener que depender del transporte público y sus horarios.
2. Mapear los negocios cercanos
Una excelente idea para ahorrar gastos es hacer un mapeo de la zona en donde nos hospedamos y buscar negocios con ofertas. Conocer los alrededores de nuestro alojamiento es fundamental para evitar gastos que pueden economizarse.
Por supuesto que siempre podremos darnos gustos, pero para los gastos menores lo mejor es buscar precios competitivos. De esta forma, el grueso de nuestros gastos estará relacionado directamente con el placer.
3. Hospedarse en un lugar con cocina
Relacionado en cierta medida con lo anterior, una excelente idea para reducir un poco nuestros gastos es hospedarnos en un lugar que nos permita cocinar. Así no tendremos que depender exclusivamente del gasto excesivo de buscar comida hecha todos los días.
Esto no significa que no podamos salir a comer algo a algún lugar que queramos, pero sí será una gran ayuda para no tener que estar obligados a hacerlo siempre. La comida suele ser uno de los principales gastos cuando estamos de viaje.
4. Recorrer la ciudad por nuestra cuenta
Si antes recurrimos al alquiler de autos, esto será muy sencillo de hacer. Depender de uno mismo para moverse por los lugares que visitemos será un gran ahorro, al no tener que recurrir a tour o guías pagos.
Además, estamos convencidos de que los lugares a los que llegaremos serán mucho más interesantes y más relacionados con lo que queremos ver que de cualquier otro modo. Es una ganancia asegurada.
5. Intentar mantener una vida similar a la de casa
Finalmente, este último consejo atenta un poco contra la idea de vacaciones que puede implicar viajar a otro lugar. Pero no siempre este es el motivo del viaje o, incluso si lo es, igual conviene cuidarse un poco con ciertos gastos.
Esto apunta fundamentalmente a lo económico, y tiene que ver con no tener gastos insólitos que no tendríamos en el lugar donde vivimos. Sin duda, esta templanza supondrá un ahorro considerable para nuestra economía.