Ángel Pablo Paniagua tenía 42 años y se encontraba trabajando, como lo hacía todos los días. Esa trágica mañana, había llevado, junto a otros compañeros de trabajo, ramas en un acoplado que era cinchado por un tractor.
Luego de descargarlas en Barrio Don Pedro, como tantas otras veces se dirigían a la repartición Municipal. Angel venía en la parte de atrás cuando, en la mañana del Miércoles 23 de Marzo, cayó del tractor de la Municipalidad de Avellaneda y golpeó su cabeza contra el pavimento, en las inmediaciones de calles 307 y 330.
Allí quedó desvanecido. Desde esa esquina fue trasladado por una ambulancia hasta el Hospital Regional Reconquista.
Luego de casi dos días de lucha por sobrevivir, el empleado municipal que se desempeñaba realizando tareas de recolección de ramas, perdió la vida. Angel vivía en el Barrio Belgrano de Avellaneda, tenía a sus padres y 8 hermanos.
Para Ángel Dorado, Secretario General del SITRAM Avellaneda, la Municipalidad cometió un «fraude laboral», realizado a través de la utilización de Cooperativas para deslindar responsabilidades sobre los trabajadores. Paniagua venía en la parte trasera de un tractor recolector con acoplado, en el momento en que golpeó su cabeza al caer el suelo, pertenecía a la Cooperativa “El Arbol” y no figuraba como empelado municipal.
“Las cooperativas le generan miedo a los trabajadores y le dan la opción: o es eso o la nada misma. Entonces, terminan incorporándose donde el pago no llega a los 20 mil pesos quincenales por jornada de trabajo de 7 horas, 5 días a la semana. Esto es explotación lisa y llana. No tienen aseguradora de riesgo de trabajo ART, contratan un seguro totalmente pequeño, la informalidad sigue reinando, y al no ser considerados empleados municipales, no tienen representación sindical, no tienen a quien quejarse o reclamar por sus derechos” Indicó el delegado del Sindicato De Tranajadores Municipales de Avellaneda, en una nota realizada para el programa Reconquista Hoy.
