Una maestra del Jardín Loyola, en la ciudad de Santa Fe, encontró un revólver en la bolsita de un nene de 2 años. El hecho ocurrió mientras los niños estaban sacando sus tacitas para desayunar, cerca de las 8 de la mañana.
Los directivos inmediatamente llamaron al 911 y activaron los protocolos correspondientes para cuidado y prevención. Una hora más tarde sus padres ya estaban demorados en una comisaría para explicar la situación. Simultáneamente, la abuela del pequeño lo retiró de la institución educativa.
«En el territorio donde nosotros desarrollamos nuestras políticas sociales, entendemos que podemos encontrar distintas complejidades. Por esto, activamos diferentes protocolos. Esto es parte de la realidad que nos toca asumir», explicó Huaira Basaber, subsecretaria de Educación y Cultura de la Municipalidad de Santa Fe, a Aire de Santa Fe.
«Todo el proceso está en investigación. Lo que nosotros tenemos que tener en cuenta, primero que todo, es cuidar los derechos de las infancias. Velar porque ese niño o niña no sea retirado del jardín, hasta tanto y cuánto nosotros podamos tener las intervenciones correspondientes. Y todos esos procesos se dieron como correspondían», añadió Basaber.