Dos niños de 12 años, que viven en Bahía Blanca, robaron el auto del padre de uno de ellos para escapar a Rosario. Hicieron 450 kilómetros, hasta General Villegas, cuando los descubrieron.
Tenían intencion de llegar a la ciudad santafesina para visitar a una amiga y donde, además, vive la mamá de uno de ellos.
Como si esto fuera poco, en la ruta levantaron a una persona que estaba haciendo dedo. Colaboró con ellos para la nafta.