Guillermo Kees, secretario de la Cámara de Cabañeros y Prestadores de Servicios turísticos de Santa Fe (CABASETUR), reveló a Aire de Santa Fe que la ocupación de cabañas en la costa santafesina no llegó al 50%.
El fin de semana extra largo de junio no fue el mejor para este rubro. La gente prefirió quedarse en su casa, pero ¿por qué motivos? Kees hipotetiza que por la crisis económica y dado las vacaciones de julio, que ya se están palpitando. «Junio históricamente fue un mes flojo para nuestra actividad. Es muy difícil nuestro rubro, porque es lo primero que ajusta la familia argentina cuando la economía no anda bien. Y en nuestro país la economía no anda bien desde que tengo uso de razón», dijo el empresario.
Además, explicó que también influyó el día del padre porque «Cuando el feriado largo coincide con esta celebración, las familias no suelen moverse de sus casas. Estuvimos cerca del 50%. Algunos no llegaron al 50%. De todos modos, charlando con los comerciantes de cada pueblo de la costa, ellos ven que hubo consumo en un bar, en la verdulería, en la carnicería».