El conflicto que comenzó en el mes de julio con la toma ilegal de tierras en el sector sur de la ciudad, ahora llega a un principio de solución que es la menos deseada. Pasaron mediaciones e intentos de diálogo pero las familias allí presentes no están dispuestas a salir de los terrenos.
Hace algunos minutos finalizó una nueva audiencia en la que se pidió el cese del estado antijurídico, es decir que el damnificado (la municipalidad) pide que se ponga fin a la conducta que causa el daño, que viene a ser la toma de terrenos. Vale recordar que esas tierras fueron adquiridas por el estado municipal para crear cerca de 300 lotes sociales, pero fueron usurpadas y se detuvieron las obras de urbanización.
Por lo tanto, la jueza Senn determinó que se ejecute el desalojo de las personas que llevan a cabo la toma el día viernes 18 de agosto a las 13:00 horas. Y previó que la policía acuda al lugar a diario con megáfonos para advertir a los presentes que desalojen o se usará la fuerza pública. Si esto no ocurre, se presenta la posibilidad de la represión policial porque se debe ejecutar lo ordenado por la jueza.
Las tierras en disputa se encuentran al suroeste de la ciudad, entre los barrios conocidos como Guadalupe y Guadalupe Oeste. A lo largo de la calle 75 y a la altura del cruce con calles 57, 59 y 61. Los límites no son claros. El lugar es conocido como Loteo Marega por el apellido de los anteriores propietarios.