Este miércoles juraron los Diputados santafesinos y se resolvió una polémica que data desde el escrutinio definitivo. La última banca estaba en duda entre Ruben Giustiniani o Pablo Oliver. Finalmente, la Cámara decidió respaldar a Oliver.
Giustiniani obtuvo 70.980, que implica un 2.52% del total (el mínimo es 1,5% de los votos válidos emitidos) en las elecciones generales. Oliver pertenece al Frente amplio por la soberanía, que quedó en cuarto lugar; dentro de la alianza él entraba tercero, detrás de Carlos Del Frade y Claudia Balagué.
El Tribunal electoral se rigió por el porcentaje mínimo requerido y ratificó a Giustiniani. Sin embargo, Oliver se ampara en el Decreto N° 9280 de la provincia, firmado por el gobernador de facto Héctor Salvi, que dispone:
ARTICULO 5.- No participarán en la distribución de cargos en las distintas calidades de elecciones, las listas que
no logren un mínimo del tres ( 3 ) por ciento del Padrón Electoral del Distrito, sea este provincial, municipal o
comunal.
Con este precepto, Giustiniani no alcanzó el 3% (llegó al 2,49). Para hacerlo debía obtener un aproximado de 15.000 votos más.
Pablo Oliver, ambicioso por su puesto, llevó el asunto a la Cámara de diputados. En la Comisión de Poderes se ampararon en dicho Decreto, justificando que aún está vigente. Mencionaron el art. 48 de la Constitución de Santa Fe, que establece:
«Cada Cámara es juez exclusivo de la elección de sus miembros y de la validez de sus títulos y, con el voto de las dos terceras partes de los componentes del cuerpo, resuelve la existencia de causas sobrevinientes de inelegibilidad y de incompatibilidad, sin que, en ambos casos, una vez pronunciada al respecto, pueda volver su decisión».
Luego, votaron todos los Diputados: 38 votos a favor de Oliver, 8 en contra y dos abstenciones.
Las abstenciones fueron de Armas Belavi y Ródenas, que argumentaron que deberían esperar una resolución judicial, como pasó años anteriores. La Corte solía fallar a favor del 1,5% teniendo en cuenta el contexto del Decreto, la dictadura militar argentina.
Giustiniani insiste en el piso del 1,5% y cómo el sistema D’Hont le da la razón al hacer la división. Si se divide el total de los votos del Frente Amplio por la Soberanía en tres (el lugar que le corresponde a Oliver) no alcanza el 100% de los votos que fueron para Igualdad y Participación (alianza de Giustiniani). Veamos en números concretos:
- En las generales el Frente Amplio obtuvo 132.278 votos. Del Frade se aseguró su lugar por ser el primero de la lista. Balagué también con 66.139 (se divide por dos), pero ya quedaría por debajo de Giustiniani porque él cosechó 70.980 votos.
- Para la banca de Pablo Oliver hay que dividir por tres, que es 44.092 votos.
- En el medio de ambos partidos, aparece Viva la Libertad, con un total de 128.884 votos. Desde este espacio, asumieron Juan Domingo Argañaraz y Natalia Armas Belavi. En pocas palabras, superaron ambos pisos, el 1,5% de los votos y el 3% del padrón. En una división D’Hont por dos superan también a Oliver, pero no a Giustiniani.
En definitiva, el orden que asignó el Tribunal Electoral para estos tres espacios es: Carlos del Frade, Juan Domingo Argañaraz, Ruben Giustiani, Claudia Balagué y Natalia Armas Belavi. ¿Oliver? Muy por detrás.
El diputado al que le arrebataron su lugar afirmó en redes sociales que irá por la vía judicial porque son votos que les robaron a los santafesinos.
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