Maximiliano Pullaro fue amenazado por los narcos, luego de que dispusiera endurecer los controles en la cárcel de Piñeiro. Restituyó los pabellones de alto perfil, que están destinados a sicarios y jefes narcos.
En el pabellón 9 de Piñeiro habían encontrado un búnker de drogas y, además, allí está alojado Guillermo Lencina, posible autor intelectual del asesinato del policía Leoncio Bermúdez en un hospital rosarino. El sub oficial había sido acribillado por cuatro delincuentes.
Los jefes narcos y sicarios vuelven al pabellón de alto perfil. pic.twitter.com/wrhJ0paCv6
— Maximiliano Pullaro (@maxipullaro) December 12, 2023
Las amenazas a Pullaro llegaron a través de balaceras, con mensajes incluidos, en diferentes puntos de Rosario, durante las madrugadas del martes y miércoles. Todas fueron perpetradas por el narcotráfico y los mensajes iban incluidos a la familia del gobernador.
La primera advertencia fue a una sucursal del Banco Macro en Rosario. Dejaron un pedazo de cartón que rezaba: “Pullaro no te metas con el pabellón 9 de Piñeiro. Así como matamos a un policía, te vamos a matar a tu familia”.
Hace unas horas volvieron a hacerlo, pero esta vez en el hospital de emergencia Clemente Álvarez. Rosario 3 informa que los trabajadores del lugar suspendieron la atención al público luego de lo acontecido.
Ambos atentados son investigados por el fiscal Franco Carbone, jefe de la unidad de Balaceras del Ministerio Público de la Acusación.
Imágenes: Mario Galoppo y Rosario 3.
En relación con la decisión de Pullaro de endurecer los controles en la cárcel, el gobernador decidió instalar inhibidores de señal (para que no puedan usar celulares y no perpetrar más delitos desde adentro) y suspender el ingreso de alimentos a las unidades por las familias de los presos (se presume que a través de las comidas ingresan drogas). En este último punto, se les proveerá cuatro comidas diarias a los delincuentes.
Se suman las medidas del Ministro de Seguridad y Justicia, Pablo Cococcioni, que envió más presencia policial en las calles de Rosario y Santa Fe, en exclusiva, y en otros puntos de la provincia, aunque en menor medida. Cococcioni había criticado que durante el gobierno anterior “en Rosario hay solo 20 patrulleros más dos parejas de motoristas, mientras que en Santa Fe hay ocho patrulleros más dos motos”.
Además, hay un bloqueo administrativo por 90 días (no pueden sacar licencias) para que todos los policías estén disponibles para luchar en las calles. El próximo paso es mejorar las condiciones de los vehículos.
A través de la red social X (Twitter), el perfil oficial del gobierno de Santa Fe reafirma su postura de lucha:
• Santafesinos: tenemos una decisión y no vamos a ceder en las acciones de gobierno hasta lograr que nadie cometa delitos desde la cárcel. Es el compromiso que asumimos para lograr la paz y la tranquilidad que merecemos.
— Gobierno de Santa Fe (@GobSantaFe) December 13, 2023
Desde hoy la policía de Santa Fe abandona las tareas administrativas para volver a la calle. Vamos a recuperar los móviles para que estén en condiciones de patrullar. Por eso, junto al Ministro de Seguridad @PabloCocoX anunciamos medidas para garantizar la seguridad de los… pic.twitter.com/fbG1moGLTs
— Maximiliano Pullaro (@maxipullaro) December 12, 2023