A principios del siglo XX, cuando los estados convivían de forma independiente en el mundo, y no establecían relaciones más que para ciertos acuerdos comerciales y alianzas de tipo bélico, cada país manejaba su política monetaria. Cada uno tenía su divisa y decidía cómo se establecía la forma de proceder con ella en su territorio. Esto generaba desequilibrios en los cambios, y daba lugar a que ciertas monedas valiesen más que otras.
A finales de ese mismo siglo, las cosas cambiaron. Las alianzas de los países, que se fraguaron durante los periodos bélicos mundiales, fueron un poco más allá. Esas uniones comenzaron a producirse también desde el punto de vista económico y comercial, dando lugar a comunidades como, por ejemplo, la Comunidad Económica Europea.
Eso desembocó en que 27 países del viejo continente formen parte hoy de la Unión Europea y que, varios de ellos, compartan el Euro como moneda. El comportamiento de esa divisa, y por tanto de gran parte de la economía de los países que la usan, está regida por el Banco Central Europeo.
Al otro lado del charco, en Estados Unidos, no se ha producido esa unión de países ya que, en cierto modo, el país americano ya representa una alianza de diferentes estados. Allí quién lleva los aspectos monetarios es la Reserva Federal. Dentro de ella, hay un órgano que resulta clave: el Comité Federal de Mercado Abierto, más conocido como FOMC.
Tiene varias funciones y todas ellas relacionadas con dirigir el comportamiento del dólar americano. Pero, ¿cuáles son sus funciones más específicas? A continuación, varios aspectos en los que destaca este órgano.
Elegir una política monetaria
La FOMC es la encargada de establecer la política monetaria de los Estados Unidos. Sus herramientas para poder controlar este tema son dos muy claras: las tasas de interés y la oferta monetaria. Con la subida o bajada de estas controla y condiciona la situación económica del país, y las va modificando según sea la situación que quiere generar.
Sus objetivos siempre están relacionados con garantizar el máximo empleo posible, evitar cualquier tipo de tendencia inflacionista que dispare los precios, y conseguir que las tasas de interés no resulten imposibles de asumir para los ciudadanos.
Determinación de la tasa de interés
Profundiza un poco en lo comentado anteriormente. La FOMC decide la tasa de interés a la que se presta el dinero, y los bancos, que centran sus operaciones en este valor, utilizan esas tarifas con otras entidades, con sus clientes o con quién sea que llevan a cabo una operación. Evidentemente, cuanto más alta sea la tasa, más ralentizada se verá la economía, ya que la posibilidad de llevar a cabo este tipo de operaciones se limita.
Curiosamente, la FOMC ha sido noticia en las últimas semanas por su negativa a bajar los tipos de interés, que en este momento están situados en el 5.25% anual. Todo ello provocado por la gran inflación que ha golpeado al mundo en los últimos dos años y medio, y que, al contrario que en territorio europeo, no parece estar acabando de remitir en el país americano.
Operaciones de mercado abierto
La FOMC también se encarga de operaciones económicas. Hace compra-venta de valores del Tesoro y de otros activos que están en el mercado con el fin de influir en la cantidad de dinero que se encuentra en circulación. El objetivo de esto es controlar de alguna manera el mercado y poder acercarse a las metas que marca su política monetaria.
Gran transparencia
En Estados Unidos, la FOMC es percibida como un órgano fiable por parte de la ciudadanía. Parte de este respeto viene motivado porque se trata de una institución tremendamente transparente con la sociedad. Después de cada reunión, publica un informe donde se explican las decisiones que han tomado en política monetaria y los motivos de estas. Tiene tal nivel de fiabilidad, que hasta hace público lo que se ha dicho en esos encuentros minuto a minuto.
Por supuesto, más allá de eso, sus responsables ofrecen ruedas de prensa delante de los medios de comunicación para explicar sus deliberaciones.
Supervisión de la economía
A nivel de análisis, la FOMC observa de forma continua lo que está pasando en lo referente a la economía tanto en Estados Unidos como en el resto del mundo. Esto le sirve para, juntando toda la información, hacer proyecciones y poder trabajar por delante en todo lo referente a decisiones futuras sobre política monetaria.
Apoyo internacional
Como es evidente, instituciones como la FOMC trabajan codo con codo junto a otras, como el propio Banco Central Europeo, con el fin de conseguir una estabilidad económica y financiera a nivel mundial, que acabe reportando beneficios a todos los países. Curiosamente, la subida de tipos de interés comentada con anterioridad con motivo de la inflación, fue prácticamente paralela a nivel de Europa como de Estados Unidos.
